Mezclar, amasar, componer y plastificar

Se realiza un ensayo típico con el mezclador, a una velocidad determinada (velocidad de cizalla), y la respuesta del material se registra como par de torsión. La temperatura de la cámara de mezcla se controla con precisión mediante zonas de calentamiento y enfriamiento independientes, pero debido al calor generado en la cámara de mezcla por la fricción, se produce un cambio en la temperatura del material, que se registra como una señal de medición. Este «reograma» (par de torsión, temperatura de fusión frente al tiempo a velocidad constante) es característico para distintos materiales o mezclas, y con frecuencia se utiliza como «huella dactilar» en los procesos de control de calidad para inspeccionar la salida y entrada de productos. Es posible medir y cuantificar aditivos de distinto tipo y concentración de forma objetiva a través del comportamiento de fusión, la energía consumida o la viscosidad del material fundido (par de torsión registrado).

Investigaciones más comunes

• Pruebas de comportamiento de fusión y degradación de material fundido polimérico
• Cuantificación de la viscosidad al añadir nanopartículas u otros aditivos
• Pruebas de comportamiento de gelificación y plasticidad de mezclas secas de PVC
• Medición del comportamiento de fluidez y curado de plásticos termoestables
• Caracterización de influencias de distintos aditivos como el negro de carbón, rellenos, lubricantes, aceleradores o azufres para mezclas de goma
• Registro de comportamientos de masticación y vulcanización de elastómeros
• Medición de la absorción de aceite del negro de carbón
• Cuantificación de la absorción de DOP en mezclas secas de PVC
• Medición del par estable respecto a las influencias individuales y combinados de rellenos y aditivos tales como estabilizantes, lubricantes y pigmentos de color
• Comprobación de plásticos de alto rendimiento para verificar su procesabilidad
• Realización de mediciones de conductividad eléctrica para mezclas de cauchos